Horror Box: Ouija - Valoración de un escape room
Viviendo una película en tus propias carnes
¿Quieres vivir una auténtica experiencia paranormal?
Esta es una pregunta con la que los amigos de Horror Box nos invitan a participar en una de sus salas: Ouija.
Poca presentación necesita la sala dado el nombre del juego. Una sesión de espiritismo para contactar con entes del “más allá” dará inicio a un juego de supervivencia donde la falta de tiempo, las estancias claustrofóbicas y muchas sorpresas que aquí no desvelaremos convierten toda la experiencia en una inolvidable para todos los amantes a los escape rooms.
Uno de los mayores aciertos de todo el trabajo puesto detrás de la sala es la traslación de una idea tan cinematográfica en un entorno de inmersión en vivo. Los amantes del cine de terror ya conocemos los elementos habituales de este tipo de historias: lugares encantados, espíritus en busca de venganza, conflictos todavía por resolver, y una lucha a vida o muerte entre el más allá y las personas vivas.
Gracias a una buena combinación de efectos sonoros, dirección de arte y algún recurso del juego realmente original y que aquí no desvelaremos, se consigue trasladar ese tipo de emoción convirtiendo todo el juego en uno realmente terrorífico, que te mantendrá en tensión de principio a final.
El poder de una buena ambientación
La ambientación esta realmente conseguida, y ayuda el planteamiento de una historia directamente enlazada con los distintos acertijos. A medida que avancemos en ellos, iremos desgranando detalles sobre la historia. Poco a poco, o según el ritmo de los jugadores, conoceremos el pasado de la casa y de sus habitantes.
En cuanto a los acertijos en si, lo cierto es que tienen un nivel de dificultad exigente. La mayoría de ellos suponen un reto auténtico, y te obligan a aplicar un aspecto interesante en estas experiencias: el trabajo en equipo es crucial para seguir avanzando. Algunas veces para poder averiguar las soluciones de los puzles a tiempo, y otras obligando a los grupos a separarse momentáneamente, en lo que, para el que esto suscribe, son las partes más emocionantes y potencialmente terroríficas de la sala.
En todo caso, a pesar de lo comentado, los game masters se preocupan de que no nos quedemos atascados durante mucho tiempo. Están siempre atentos a nuestros movimientos. Si ven que perdemos mucho tiempo en alguna prueba, nos dan pistas. Por otra parte, si ven que desandamos nuestros pasos equivocadamente, invocan a algún ser del más allá para que corramos despavoridos hacia donde nos toca estar.
En resumen
Poco más podemos decir sin entrar en detalles. Como en toda sala, lo mejor es ir y experimentarla personalmente. La experiencia global fue muy satisfactoria, y por tanto no puedo hacer más que recomendarla encarecidamente. Salvo una excepción, por supuesto: que el terror no sea lo tuyo. En cuyo caso lo mejor es que busques otro tipo de sala.