¿Alguna vez os habéis quedado encallados intentando resolver algún tipo de puzle? ¿O, jugando a algún videojuego, habéis caído en un momento donde simplemente no sabéis cómo avanzar? Todos los que vivimos el apogeo de las aventuras gráficas con Sam & Max, Indiana Jones and the fate of Atlantis, Monkey Island o cualquier bizarrada de por aquel entonces sabemos muy bien a qué nos referimos. Y seguro que todos llegamos al punto de querer tirar el ordenador por la ventana cuando no entendíamos las claves de las instrucciones, o cuando el juego nos pedía hacer llamadas infructuosas a las oficinas de la ahora difunta LucasArts.
Pues bien, aunque el contexto y las condiciones físicas no son exactamente las mismas, lo mismo puede suceder con, quizás, demasiada facilidad, mientras uno está intentando salir indemne de un escape room. Y en este caso no existe ningún tipo de manual o guía que te asegure salir victorioso de dicho reto, ni te asegura el salir de una sala en tiempo récord tras haber conseguido encontrar todas las claves de otra sala, una probablemente muy diferente. Es más, aunque existiese dicho manual, aquí tampoco daríamos las claves, porque lo importante a veces no es el destino sino la experiencia del viaje.

Lista de trucos escape room
Así, en esta nueva entrada de blog nos limitaremos a ofreceros algunos tips, trucos y/o consejos para que vuestra próxima sesión de escape room vaya todavía más rodada que la última a la que fuisteis. Sin más, empecemos con ello.
¡Ojo con la introducción!
1. La mayor parte de salas -por no decir todas ellas- empiezan con una breve presentación por parte del máster. Introducen la historia, presentan la sala un poco por encima, y, entre otras cosas más, también marcan algunas reglas a tener en cuenta. Lo que quizás puede pasar por alto es que en estas indicaciones podría haber pistas o indicaciones escondidas que puedan resultar de ayuda en la futura resolución de los acertijos. Por lo que recomendamos prestar atención a la primera explicación del master. No solamente para conocer mejor la sala, sino además para procurar que no pase desapercibida alguna pista que ayude en la resolución de la sala.
Los game masters también son humanos
2. Los acertijos han sido creados por personas no muy diferentes a ti, la persona que va a jugar a las salas. No es raro que nosotros mismos nos encallemos a la hora de resolver alguno de los acertijos. En estos casos, lo mejor es tomar un respiro, dejar unos segundos, y recordar que a veces la respuesta es mucho más simple de lo que estamos imaginando.
Organizar el grupo
3. Todas las salas son iguales: tiempo justo, atmósfera, algunas veces, terrorífica y/o claustrofóbica; y mucha tensión en salir de la sala antes de que se termine el tiempo. Considerando esto, una práctica imprescindible es tener una buena organización dentro del grupo para guardar y clasificar las pistas u objetos aparentemente importantes que se van encontrando durante el juego. Para ello, se puede establecer una zona como “base central” donde almacenar todas esas cosas que tal vez, y con suerte, servirán para poder salir de la sala exitosamente. Además, de este modo se evita que dos personas encuentren separadamente dos piezas del mismo puzle, y no se den cuenta que juntos resuelven el rompecabezas que les tiene pillados.
Orden, orden y más orden
4. También es común que dentro de la sala haya un montón de pistas, palabras y textos. Muchos solo sirven para marearnos un poco, pero otros sí guardan una mayor relevancia. Es por eso que seguramente será importante prestar mayor atención a aquellas palabra o frases de mayor tamaño de fuente, resaltado en negrita o subrayadas para diferenciarlas del resto.
Comunicación interna para trucos escape room
5. Otra cosa a tener en cuenta sería el encontrar un grupo bien equilibrado de personas. Es decir, tener un grupo formado por personas con habilidades que se complementen: uno que tenga facilidad en encontrar las cosas, otros con buena capacidad para resolver acertijos de lógica pura, etc. Además, que haya confianza entre las personas del grupo. Si se reparte la tarea de búsqueda entre todos los miembros, que cada uno se ciñe a su zona para no volver a hacer el trabajo que hace otro, mientras su zona queda desatendida. Y, sobretodo, que haya mucha comunicación. Hablarlo todo durante el tiempo que te dan para salir de la sala.
6. De un modo parecido, también puede ser buena idea marcar a una persona para que sea el “líder” del grupo. Tanto para organizar cómo buscar en la sala, como para acudir a él con todas las pistas para que diga cual puede ser el mejor modo de combinarlas.
Conocimiento previo
7. Entrenar con puzles y acertijos parecidos que puedas encontrar por internet. Puedo poner los siguientes ejemplos: el acertijo de Einstein, o https://www.365escape.com/
8. Saber cómo funcionan estas salas: todas estas salas se retroalimentan mutuamente. Como en muchos otros aspectos de nuestras vidas, la experiencia lo es todo para salir de las salas.
En resumen…
El último punto, y el más importante con mucha diferencia, es no olvidarse nunca de porqué se acude a este tipo de actividad: simplemente pasárselo bien. Disfrutar de la experiencia, y recordar que al final lo más importante es la experiencia grupal que te ofrece un escape room.